Valencia es un importantísimo enclave para las relaciones comerciales con Europa en el cual las empresas cuentan con un centro logístico de primer nivel que incrementa la competitividad de su economía: el Centro de Carga Aérea del Aeropuerto de Manises, que ocupa el tercer lugar de España. En ese sentido, Valencia aporta como ventajas comparativas su situación geográfica, sus comunicaciones terrestres y su cercanía a uno de los primeros puertos del Mediterráneo; es decir: su enorme capacidad multimodal.
Estas afirmaciones, junto al reconocimiento del papel que Cámara Valencia ha desempeñado en la reivindicación histórica de esta infraestructura, son las conclusiones principales de la jornada celebrada el pasado día 24 de Noviembre en la Cámara de Comercio de Valencia. Presidida por Juan Cámara (vocal del Comité Ejecutivo) en representación del titular de la Corporación, Arturo Virosque, la sesión contó con la participación de José Vicente Colomer (catedrático de Transportes de la Universidad Politécnica de Valencia), José Jorge del Castillo (director general de Centros Logísticos Aeroportuarios/CLASA, vinculada a Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea/AENA), Rafael López-Chapi (director de Aéreo-Marítimo de Schenker-España, S.A.), y Julián Cámara (director del Aeropuerto de Manises).
Como recalco Juan Cámara, el centro de carga aérea de Manises es “un enclave estratégico para el transporte multimodal” ya que “Valencia se ubica en una situación privilegiada en el Arco Mediterráneo como encrucijada de rutas que cuenta con nodos logísticos de primer nivel”. “Entre estos centros de primera magnitud –ha dicho Juan Cámara-, CLASA ha apostado firmemente por una infraestructura muy operativa cuya proximidad a la ciudad de Valencia, en la intersección de las principales vías de comunicación, y cuyo Puesto de Inspección Fronteriza, hacen de la misma una instalación muy interesante para el transporte multimodal”.
A las ya citadas ventajas comparativas de la Central de Manises hay que unir –como ha citado Juan Cámara- la existencia de un Puesto de Inspección Fronteriza (PIF), esencial porque permite la importación directa de productos perecederos y mercancías sometidas a control en frontera en ámbito de la Unión Europea. El PIF de Valencia, además, cuenta con servicios de control fitosanitario.
Diez años de reivindicaciones
En la jornada también se puso sobre el tapete el protagonismo que la Cámara de Valencia, como portavoz de los intereses de la economía productiva en general y del sector del transporte en particular, ha venido desempeñando, hace ya más de diez años, reclamando de las autoridades aeroportuarias españolas para Manises unas instalaciones acordes con el potencial productivo y comercial de Valencia. En ese sentido, el presidente de la Cámara, Arturo Virosque, ha liderado en ese periodo numerosas iniciativas y gestiones para trasladar las inquietudes del empresariado valenciano acerca de los problemas que planteaba la insuficiencia de Manises en cuanto a dotaciones y servicios para atender la demanda real en materia de viajeros y mercancías: una demanda que, hasta la entrada en servicio de la central de carga aérea hace aproximadamente año y medio, venía desviando tráficos a otros aeropuertos, con la consiguiente pérdida de competitividad para la economía valenciana.
El mismo presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, reconoció expresamente ese protagonismo de Cámara Valencia cuando, en el acto de inauguración oficial de las instalaciones del aeropuerto de Manises (el 10 de abril de 2007), dijo: ““el Aeropuerto de Valencia necesitaba urgentemente un cambio de rumbo reclamado insistentemente por la sociedad valenciana y, de forma explícita, por la Cámara Oficial de Comercio, Industria y Navegación desde el año 1995; un cambio que a partir de 2004 se ha empezado a asumir como un compromiso iniciando una potente inflexión al alza tras varios años de crecimiento simplemente vegetativo. Desde 2003 el tráfico de pasajeros se ha más que duplicado en este aeropuerto, al pasar de 2.400.000 a 5 millones de pasajeros anuales”.
Casi 12 millones
Las instalaciones del Centro de Carga Aérea de Manises han supuesto una inversión directa, por parte de CLASA, de 11,8 millones de euros hasta el cierre del ejercicio de 2007, a los cuales hay que añadir una previsión de más de 2,9 millones de euros para el periodo 2008-2010. La inversión por cuenta de clientes, hasta el cierre del ejercicio 2007, alcanza la cifra de 4,1 millones de euros, con una previsión para el periodo 2008-2010 de 2,8 millones de euros.
Como ha quedado patente en la jornada, la terminal de carga aérea de Manises cuenta con dos líneas de operación. La primera, un sector de más de 3,1 hectáreas que alberga seis naves y el ya citado PIF. Estas instalaciones, operativas desde principios de 2007, están ocupadas por tres operadores de “handling” (Calderón Handling/Groundforce, Flightcare y WFS) y dos compañías “courier” (EAT/DHL y UPS) que, por su actividad específica, requieren acceso directo a la plataforma de aeronaves. En la segunda línea está el edificio de Servicios Generales (con 3 plantas y más de 1.400 metros cuadrados de oficinas, ocupadas por firmas de transitarios y logística y por las dependencias de la Administración de Aduanas, que complementan al PIF); asimismo, en esta segunda línea se ubica una nave para el operador logístico SpainTir, del grupo Schenker, sobre una parcela de más de 10.000 metros cuadrados. Para atender demanda futura se cuenta con más de 20.000 metros cuadrados adicionales, ya urbanizados y dotados de todos los servicios.
Fuente: Camara de Valencia
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